ARQUITECTOS DE LA EDUCACIÓN

 

 Para levantar una escuela, requerimos de una buena base y unos excelentes pilares que aguanten el paso del tiempo.

   Para construir la educación necesitamos a esos padres y madres brillantes capaces de dialogar y nutrir la personalidad de sus hijos/-as, los que enseñan a pensar, los que no solo elogian los excelentes resultados sino que preparan a sus hijos  para los fracasos…  

   Precisamos también de esos maestros fascinantes que no ven a sus alumnos como un número, sino como únicos e irrepetibles, los que no utilizan la memoria como almacén de datos sino los que enseñan a sus alumnos/-as a ser pensadores y no repetidores de información, los que no hablan solo con palabras sino con su propio corazón.

   “La educación no necesita de una reforma, sino de una revolución. La educación del futuro ha de formar pensadores, emprendedores, soñadores, líderes no sólo del mundo en que estamos, sino del mundo que somos” (Augusto Cury).

   Padres, madres, alumnos, alumnas, maestros, maestras…cada uno de nosotros somos ese ladrillo imprescindible que aguanta y sostiene los pilares de la educación. Aunemos nuestras fuerzas y construyamos la escuela de nuestros sueños…